Donde surge el principio de legalidad o reserva

Este principio surge durante la ilustración y la revolución Francesa, consagrado en la declaración de los derechos del hombre y del ciudadano.
En materia teórica jurídica penal el primer autor que enuncia este principio fue Fuerbach, en 1801 sistematizando el principio en una formula latina vigente hasta hoy:
“Nullum crimen, nulla poena sine lege”.

Este principio, hoy ampliamente reconocido y consagrado, contiene una doble referencia: al delito y a la pena. Por una parte, “No hay delito sin ley” y, por otra, “No hay pena sin ley”.

La doctrina luego agrega la expresión “Nullum crimen, nulla poena sine lege Scrita, Stricta et Praevia”.